El desarrollo sensorial y la integración sensorial es un tema que me lleva teniendo ocupada un tiempo, es de esos temas que me ha atrapado por diferentes motivos, entre ellos por motivos personales. Uno de mis hijos tiene una dificultad en la integración sensorial y hace unas semanas os lo contaba en un vídeo en directo improvisado. Al compartir mi experiencia el tema generó mucho interés, muchas familias vieron luz y algunas personas me pedisteis que os contase más sobre ello.

Organizar toda la información ha sido complejo. Empecé a tirar del hilo, a buscar estudios científicos, investigaciones, publicaciones sobre este tema…he ido organizando toda esa información para poder presentarla de forma cronológica y ordenada según las diferentes etapas del desarrollo del bebé y con propuestas contrastadas y explicadas que podrás poner en marcha desde el primer momento con tu bebé. Empiezo entonces, como debe ser, por el principio.

El nacimiento. El bebé nace y las primeras sensaciones extrauterinas llegan. La sensación de gravedad, su respiración, la intensidad de los sonidos que ahora es mayor, los olores…todas estas sensaciones tienen que ser organizadas en su cerebro y así ir elaborando las respuestas adecuadas (adaptativas) a esas sensaciones. Empieza todo. La maquinaria se pone en marcha y queremos acompañarle para facilitar su pleno desarrollo. Conocer cómo va madurando el cerebro a través de las sensaciones que percibe el bebé nos da claves a los padres/madres/cuidadores para poder favorecer esa correcta ‘puesta en marcha’ del cerebro.

En esta Semana Europea del Porteo que empieza el lunes, el lema es ‘El porteo conecta’ y, en esta ocasión, quiero hacer hincapié en cómo el porteo conecta nuestras sensaciones, conecta nuestros sentidos y eso crea los ‘pilares’ para todo el desarrollo posterior del bebé.

Para ello empezamos con este artículo más general, publicamos la primera parte hoy y la segunda parte mañana, ahondando un poco en el desarrollo sensorial, la integración sensorial y qué papel tiene en todo esto el porteo. En los sucesivos días, durante la Semana Europea del Porteo, hablaremos cada uno de los días de uno de los sentidos que se verán estimulados al portear.

Más adelante hablaré sobre la importancia del Movimiento libre a nivel sensorial y sobre juegos, juguetes y actividades de la vida diaria que favorecen el desarrollo sensorial en las diferentes etapas del desarrollo.

¿QUÉ ES LA INTEGRACIÓN SENSORIAL?

Es la forma que tiene nuestro cerebro de gestionar y organizar toda la información sensorial que recibimos. El bebé recién nacido cuando está en brazos está percibiendo el olor de la persona que lo sostiene, la presión en su piel al tenerle sostenido, el movimiento al mecerle o movernos (sentido propioceptivo), es capaz de ver la cara del adulto que le lleva y percibe los estímulos visuales del arededor (aunque no sea de forma nítida todavía), capta los diferentes sonidos (voces, ambiente…), el sentido del gusto se activa al ser alimentado, chupar, llevarse las manos a la boca, percibe el tacto, de los diferentes tejidos de las prendas de ropa, la gravedad (sentido vestibular)…

Las sensaciones que percibimos, no solo vienen de los 5 sentidos más conocidos (vista, oído, gusto, olfato y tacto) si no que van más allá. Las sensaciones que nos informan del lugar que ocupa nuestro cuerpo en el espacio y de su movimiento (sentido propioceptivo y sentido vestibular) y las sensaciones que nos informan de lo que ocurre en el interior de nuestro cuerpo (sentido visceral) tienen un gran papel en el desarrollo evolutivo general.

Todo ocurre a la vez, toda esa información entra en el mismo instante, enviando impulsos nerviosos de las diferentes áreas de entrada de esas sensaciones al cerebro que tiene la compleja tarea de procesarlas, organizarlas e integrarlas con el fin de desarrollar una respuesta adaptativa.

Un ejemplo de respuesta adaptativa sería la de estirar los brazos para alcanzar un objeto cuando se pone delante. El reflejo innato de prensión (agarrarse) también es una respuesta adaptativa al percibir la sensación de tacto en la palma de la mano.

Cada respuesta adaptativa que genera el bebé va integrándose, permitiendo que esa respuesta adaptativa sea cada vez más compleja y elaborada, logrando así alcanzar otros hitos del desarrollo. Por ejemplo, alcanzar ese objeto cuando está un poco lejos gateando, sería una respuesta adaptativa más elaborada y compleja, ha evolucionado.

Cuando la integración sensorial es pobre la respuesta adaptativa no será la adecuada.

La integración sensorial tiene un impacto directo en nuestra vida diaria, cómo dirigirnos a los demás, cómo comportarnos en diferentes situaciones, cómo aprendemos y asimilamos ese aprendizaje, etc.  por lo que durante la infancia el bebé/niño estará formando, a través de las sensaciones que perciba y cómo las perciba, los ‘pilares’ que sentarán las bases de su desarrollo posterior más complejo y más maduro*.

Hasta los 7 años aproximadamente el cerebro del niño es, ante todo, una máquina de procesar sensaciones*, siente y obtiene significados directamente a través de los sentidos, por lo que, se podría considerar que durante los primeros 7 años de vida las experiencias sensoriales tienen mayor relevancia.

¿QUÉ OCURRE SI LA INTEGRACIÓN SENSORIAL NO ES ADECUADA?

Cuando la integración sensorial es deficiente y la respuesta adaptativa no es la adecuada afecta de forma general al desarrollo integral (en mayor o menor medida dependiendo de cuál, cómo y en qué grado la información sensorial no se está procesando adecuadamente) pudiéndose manifestarse a través de comportamientos que se salen de la ‘norma’, comportamientos que no ‘encajan’ con el día a día y dificultan mucho tareas sencillas del día a día. Se ven afectadas muchas facetas de la vida cotidiana (dificultades para ciertos aprendizajes, dificultades de comportamiento…). 

Es además, especialmente dificultoso, para un niño con una dificultad en la integración sensorial encajar en ‘lo que se espera de él’ en nuestra sociedad (p.ej, ir con horarios cerrados, mantenerse sentado, callado y quieto en el colegio o en otras situaciones del día a día, mantenerse en calma aunque haya ruidos que le resulten molestos a su alrededor,  etc.).

Se considera el desarrollo sensorial y la integración sensorial como la ‘base’ de todo lo demás, cualquier aprendizaje a nivel emocional, social, motor, intelectual, requiere de una correcta integración sensorial para que se dé de forma adecuada y exitosa.

Cuando la integración sensorial es adecuada para atender las demandas del entorno, las respuestas son eficientes, creativas, adaptativas y placenteras. El niño se divierte. Si no es así, genera frustración, tristeza, inseguridad y en consecuencia, una baja autoestima.

Sala tipo de Terapia Ocupacional. Foto cedida por Salude.

Sala tipo de Terapia Ocupacional. Foto cedida por Salude.

Una integración sensorial no adecuada está muchas veces asociada a otros trastornos/síndromes, pero puede darse de forma totalmente aislada. Cuando se da de forma aislada es posible que el diagnóstico sea tardío ya que puede ‘confundirse’ al principio con una falta de madurez, con conductas propias de la edad y, aunque esas conductas pueden llamarnos la atención o encender alguna pequeña alarma, es habitual que muchas veces pensemos que son ‘diferencias individuales’ de ese niño (es especialmente movido, especialmente tranquilo, impulsivo, etc.).

Reconocer y diagnosticar alguna dificultad de integración sensorial es muy complejo, hay que observar mucho al niño. Varios niños con una dificultad en la integración sensorial pueden mostrar ‘patrones’ de comportamiento totalmente diferentes en función de los sentidos afectados y cómo estén afectados (en qué grado y si la entrada sensorial es hipo o hipersensible). Para ello, como padres y madres, podemos observar, notaremos diferencias significativas en algunas tareas del día a día, comportamientos que no conseguimos explicarnos, y, sobretodo dificultades en las actividades de la vida diaria (a nivel social, motor, comportamientos, etc.). Si tienes dudas sobre ello te recomiendo una evaluación con una/un terapeuta ocupacional especializado en Integración sensorial, la forma de evaluar es totalmente lúdica y no invasiva y puede aportar mucha luz.

En el post de mañana, ya después de estas pinceladas sobre el funcionamiento del procesamiento sensorial, hablaremos sobre como afecta ser porteado a la integración sensorial.

Recursos/bibliografía:

  • Sensory Integration and the Child. Western Psychological Services, California. EEUU. A. Jean Ayres
  • The Norwegian University of Science and Technology (NTNU). (2017, January 2). Babies exposed to stimulation get brain boost. ScienceDaily. Retrieved April 23, 2018 from www.sciencedaily.com/releases/2017/01/170102143458.htm
  • Ayres Sensory Integration® for Infants and Toddlers. The Southafrican Institute for sensory integration. Susanne Smith Roley OTD, OTR/L, FAOTA, Mary Singer MS, OTR/L, & Aja Roley MA, OTR/L.